"Mientras la segregación política y social se limita a un sector concreto identificado con una etnia, religión o ideología concreta [...] las líneas rojas del sistema se mantienen más o menos claras [...]. Si, por el contrario, el movimiento político que pretende lograr un cambio estructural [...] es capaz de romper ese cerco, resituarse y plantear una unidad de acción junto con quienes, aun sin tener cercenados todos sus derechos, se oponen a toda forma de discriminación y consideran que todo proyecto democrático debe poder desarrollarse en igualdad de condiciones, entonces las opciones de avanzar de esa lucha darán un salto cualitativo." (Editorial, Gara)
diumenge, 12 de setembre del 2010
Subscriure's a:
Comentaris del missatge (Atom)
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada